Estos tiempos tan particulares que corren es habitual que nos hayamos vuelto más sedentarios y, como consecuencia, aumentemos de peso. Y a medida que se aproxima el verano surgen las inquietudes de siempre: ¿Habrá tiempo para bajar esos kilos de más en tan pocos meses y estar en forma a la hora de calzarse la malla?
La inquietud, en realidad, es la misma que todos los años. Parece obvio que si repetimos el mismo esquema no podemos esperar un resultado diferente esta vez.
La buena noticia es que no hace falta repetir esos mismos esquemas, porque de verdad existen alternativas efectivas, rápidas y seguras para esa baja de peso deseada. Estos consejos te ayudarán a encontrarla:
- Cociná en tu casa. Sobre todo si últimamente te acostumbraste a comer afuera, porque en muchos restaurantes se suele abusar de la sal y los aderezos para realzar el sabor, lo cual no es tan saludable. Cocinar en casa puede ser una oportunidad para relajarte y preparar los platos que te sean más beneficiosos.
- Agregá a tu menú más frutas y verduras. A diferencia de los hidratos de carbono ultraprocesados, cuyo consumo conviene disminuir, estos alimentos proporcionan nutrientes esenciales y son más funcionales para el organismo. Las verduras de hoja, por ejemplo, contribuyen a depurar el hígado.
- Evitá las gaseosas, refrescos, el café y las bebidas alcohólicas. Optá en cambio por los tés, el mate u otras infusiones. Recordá que es muy importante beber mucha agua diariamente para que el cuerpo se mantenga hidratado y pueda desintoxicarse.
- Elegí alimentos con propiedades detoxificantes. Múltiples estudios científicos certifican las bondades del apio, hinojo, brócoli, rúcula, limón, jengibre, calabaza, remolacha, zanahoria y otras hortalizas y verduras. Beber el jugo de estos alimentos frescos en el desayuno o la merienda te aportará energía y mejorará, por ejemplo, la función hepática.
- Entre comidas, sólo snacks saludables. El “picoteo” entre comidas será uno de tus peores enemigos para bajar de peso, y es difícil resistir la tentación. Lo mejor es preverlo y tener a mano una opción más saludable. Hay opciones más prácticas y con gran poder de saciedad, como llevar en el bolso un snack Protéifine.
- No te descontroles con la comida en las salidas con amigos. Elegí lo más liviano y evitá los platos más pesados y calóricos. Pedí que te traigan las salsas y aderezos aparte, así el control de lo que le ponés a tu plato es tuyo.
- Dormí al menos ocho horas diarias. Está probado que el buen sueño es fundamental para mantener el ritmo biológico y que se activen adecuadamente los mecanismos de limpieza del organismo. Dormir mal y bajar de peso no van de la mano.
- A moverse. Es importante que realices alguna actividad física. No hace falta que te fanatices con el deporte: puede alcanzar con que camines media hora diaria o subas a menudo las escaleras. Sin duda hay una actividad que es la adecuada para vos y podés incorporarla a tu vida cotidiana. ¿Probaste, por ejemplo, con el yoga? Ofrece muchos beneficios para tu bienestar físico y emocional