Pequeñas, dulces y potentes, las pasas de uva concentran una sorprendente carga de nutrientes y sus propiedades captan, una y otra vez, la atención de investigadores y profesionales de la salud.
Es que las pasas de uva, un fruto seco característico de la dieta mediterránea, recuperó protagonismo en el debate sobre alimentación saludable. De acuerdo con Women’s Health, especialistas en nutrición y estudios recientes coinciden en destacar su alto valor nutritivo, en algunos casos superior al de frutas frescas como las fresas o los plátanos.
Cuando se consumen 28 gramos diarios (un puñado o unas 60 pasas), cantidad recomendada por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), estos frutos pueden aportar beneficios concretos.
Asimismo, una porción aporta entre 85 y 95 calorías, más de 200 miligramos de potasio y cerca de 1 gramo de fibra, propiedades que mejoran la digestión, incrementan la ingesta de fibra, suman antioxidantes y colaboran en el control del peso corporal.