Las cámaras empresariales mantuvieron su misma postura en el Ministerio de Trabajo de la Nación al ofrecer una propuesta insuficiente y dilataron el acuerdo salarial.
Sostienen ante el BCRA un pronóstico inflacionarios para este año, pero por el otro lado, pretenden «dar migajas a sus trabajadores».
En el comunicado que realizó La Bancaria, se especifica que «tampoco dieron respuesta a los puntos presentados, como la regulación de la ley de teletrabajo, guardería universal, tercerizaciones, desarticulación del trabajo bancario, reconversión de los puestos laborales respecto al avance tecnológico, frenar los cierres de sucursales, entre otros.
«No tienen en cuenta el esfuerzo que realizan a diario los trabajadores, la situación del país y las graves consecuencias económicas derivadas de la pandemia. Ignoran que el tiempo pasa y las necesidades aumentan«, escribieron.
Y añadieron: «Es claro que con esta actitud, los banqueros no tienen en cuenta su valor más preciado, que son sus trabajadores y piensan en su rentabilidad a cualquier costo».
Por todo esto, se decidió convocar a un paro general para el 28 de abril en todo el país, en defensa del salario y los derechos de los trabajadores.