Aquí algunos consejos para alivianar la resaca de las fiestas.
Hidratación: El alcohol tiende a deshidratar el cuerpo, así que el primer paso para combatir la resaca es rehidratarse. Beber agua regularmente y considerar añadir bebidas isotónicas para reponer los electrolitos perdidos durante la celebración.
Desayuno nutritivo: Un desayuno equilibrado puede hacer maravillas para aliviar la resaca. Optar por alimentos ricos en nutrientes como huevos, bananas, tostadas integrales y frutas. Estos alimentos pueden ayudar a estabilizar el azúcar en la sangre y proporcionar la energía necesaria.
Café con moderación: El café puede ofrecer un impulso de energía, pero hay que evitar el exceso, ya que la cafeína puede aumentar la deshidratación. Optar por pequeñas cantidades y acompáñalo con agua para mantener un equilibrio adecuado.
Descanso y siestas cortas: Que tu cuerpo descanse. Si es posible, tomar una siesta corta durante el día para recuperar energías. El descanso es esencial para que tu cuerpo se recupere por completo.
Actividad física ligera: Aunque puede ser tentador quedarse en la cama todo el día, realizar una actividad física ligera, como dar un paseo suave, puede ayudar a aumentar la circulación y mejorar tu estado de ánimo.
Alivio para el malestar estomacal: Si la resaca viene acompañada de malestar estomacal, considerar alimentos y bebidas suaves como caldos, jengibre o té de menta para aliviar el malestar.
Planificación para la próxima vez: Para evitar la resaca en futuras celebraciones, es importante considerar alternar entre bebidas alcohólicas y agua, establecer límites de consumo y priorizar la comida antes de beber.
Posibles efectos de la resaca:
Fatiga y debilidad.
Sed excesiva y sequedad de boca.
Dolores musculares y dolores de cabeza.
Náuseas, vómitos y dolor estomacal.
Menos horas de sueño o sueño de mala calidad.
Aumento de la sensibilidad a la luz y al sonido.
Mareos o sensación de que la habitación gira.
Temblores.
Menor capacidad para concentrarte.
Alteraciones del estado de ánimo, como depresión, ansiedad e irritabilidad.
Latidos del corazón rápidos.