Las negociaciones salariales no prosperaron y el gremio de choferes decretó una medida de fuerza para este jueves.
La incertidumbre sobre los subsidios y la falta de interlocutor en el gobierno agravan la situación, tras el fracaso de la quinta ronda de negociaciones paritarias.
La medida afectará al transporte público de colectivos en Bahía Blanca y en todas las ciudades del interior del país.
Las negociaciones entre la UTA y las cámaras empresarias del sector no lograron avanzar en la búsqueda de un acuerdo salarial. El gremio reclama un aumento que compense la inflación y que se defina el esquema de subsidios al transporte para el año 2024.
La situación se ve agravada por la reciente renuncia del ministro de Infraestructura y Transporte, Guillermo Ferraro, quien era el interlocutor del sector empresario en las negociaciones.
En un comunicado, la UTA informó que «lamentablemente, las empresas no han presentado una propuesta que satisfaga las necesidades de los trabajadores». El gremio responsabilizó a las empresas y al gobierno nacional por la situación y advirtió que «de no mediar una solución urgente, se tomarán nuevas medidas de fuerza».