En abril el Índice de Precios al Consumidor mostró una variación del 8,9%, ubicándose tras cuatro meses de caídas consecutivas en un valor similar a octubre de 2023. Con este resultado, la inflación acumulada en el primer cuatrimestre del año alcanzó el 73,7% mientras que la variación interanual ascendió a 291,4%.
Durante el mes de abril, en Bahía Blanca, el mayor aumento a nivel capítulos fue en Vivienda, el cual registró un crecimiento del 32,2% como consecuencia de variaciones en electricidad (72,5%) debido al efecto arrastre del mes anterior, servicios sanitarios, gas y otros combustibles (54,0%), alquiler de la vivienda (14,9%), y materiales y mano de obra (5,9%).
Esparcimiento se ubicó en segundo lugar con una variación del 9,8% traccionado por incrementos del 15,3% en plataformas de streaming, 13,0% en cines y teatros, 12,0% en clubes y espectáculos deportivos y 10,5% en revistas.
Alimentos y bebidas (el capítulo de mayor ponderación), registró un crecimiento del 6,9%. Los mayores incrementos se observan en verduras, tubérculos y legumbres frescas (17,2%), caldos y sopas concentradas (16,6%), quesos duros (13,7%), carne de ave fresca (13,7%), fiambres (12,7%), comidas preparadas (12,5%), frutas secas y en conserva (12,2%), quesos blandos y untables (10,9%), empanadas y pizzas (10,9%), vino (10,8%), yogur y postres lácteos (10,5%), margarinas y otras grasas (10,4%), huevos (9,9%), refrigerio (9,2%) y aderezos (8,9%).
Respecto a los precios de la canasta de veinte variedades básicas de alimentos en la ciudad, los productos que más subieron fueron tomate (47,4%), naranja (20,1%) y pollo (15,5%). En tanto las principales bajas se presentaron en manzana (8,4%) y fideos secos (6,9%).