A partir del lunes 1º de julio, volverán a haber aumentos de combustibles (nafta y gasoil) en todo el país. Treparán más de 2%, por el traslado de la devaluación mensual del peso contra el dólar.
Entre enero y mayo, la recaudación de los impuestos a los combustibles sumó $525.858 millones, un 192,2% más que en los primeros cinco meses de 2023. Con estos ajustes, el Gobierno busca sumar ingresos por el equivalente a unos 0,5 puntos porcentuales del Producto Interno Bruto (PIB) o casi 3.000 millones de dólares, el 10% del total del ajuste que persigue el presidente Javier Milei para este año.
En ese marco, el Ministerio de Economía y la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) está trabajando en un esquema para que el impacto no sea tan fuerte, se divida en varios meses y que no se traslade de lleno a la inflación, mientras se sostiene la recaudación fiscal.