Las jornadas de limpieza son parte del programa «Bahía sin Basurales», iniciativa que busca erradicar los basurales en la ciudad, un problema que ha persistido durante al menos 20 años y se agravó desde el temporal del 16 de diciembre.
En este marco, personal del Municipio y de Bahía Ambiental SAPEM, está trabajando hoy con maquinaria pesada en diferentes basurales ubicados en Pampa Central al 2900, Belisario Roldan y Ruta 3, y el Parque Campaña del Desierto. En tanto, mañana sábado las tareas se realizarán en Más Barrios (intersección de 18 de Julio y Tierra del Fuego), donde también se sumarán voluntarios y vecinos del sector.
Este programa busca no solo limpiar los basurales, sino también prevenir su reaparición a través de acciones de control y fiscalización para evitar la acumulación de residuos; la puesta en valor de las áreas saneadas, para que sean utilizadas para fines productivos o recreativos y la participación de la comunidad, a través de jornadas de limpieza manual y educación ambiental, explicó Lautaro Girones, subsecretario de Ambiente.
Recordemos que en el marco del programa de erradicación de basurales, el intendente Federico Susbielles firmó un convenio de colaboración con Guido Lorenzino Matta, de la Defensoría del Pueblo de la Provincia, para propiciar en conjunto, espacios libres de basura.
Mediante su campaña de geolocalización de basurales, el área especializada en Derecho Ambiental de la Defensoría recibe información que aportan los ciudadanos sobre basurales y microbasurales, luego de procesarla y geolocalizarlos, se articula con el Municipio para sus erradicaciones y el seguimiento para evitar su regeneramiento.
El impacto de los basurales
Generan múltiples problemas que afectan la salud pública, el medio ambiente y la calidad de vida. Algunos de los impactos más significativos son:
*La reproducción de vectores de enfermedades como roedores y mosquitos transmisores del dengue, zika y chikungunya.
*Olores desagradables y contaminación del aire por la quema de residuos.
*Contaminación del suelo, agua y arroyos, incluyendo el estuario y el mar, afectando la biodiversidad y la salud humana.
*Problemas de seguridad, ya que pueden ser focos de incendios y accidentes.
*Impacto visual y paisajístico.