El Gobierno de Javier Milei avanza en su Presupuesto 2025 eliminando las narrativas de género que impulsó la pasada administración. Dentro de los programas de salud, se destaca la desaparición total de presupuesto para la Educación Sexual Integral, política que ya se ajustó este año en 68,2%.
El discurso libertario, en gran medida, se apuntaló cuestionando a las teorías de género, el feminismo de la cuarta ola y la “cultura woke”.
En este marco, la motosierra no sólo impactará en la ESI. También se recortará el Patrocinio jurídico a víctimas de abuso sexual, que perdió el 100% de su asignación en 2024 y no tiene fondos previstos para 2025.
El Programa Acompañar y la Línea 144 tampoco tienen asignación en el presupuesto del año venidero. LN1