El Tribunal en lo Criminal N.º 2 condenó -en juicio abreviado- a Mauro Costa por tener droga para vender mientras estaba detenido en la cárcel, como el imputado contaba con una condena previa, la pena fue unificada en 9 años de prisión.
La causa inició el 14 de marzo del 2023 cuando personal del Servicio Penitenciario, en el marco de una requisa de rutina efectuada en la celda de Costa, se le encontró marihuana fraccionada en tres envoltorios de nylon transparentes debajo del colchón.
A raíz de eso, se ordenó el allanamiento del lugar donde estaba alojado y se secuestró su teléfono celular, respecto del cual se hizo pericia UFED (Universal Forensic Extraction Device) y se recuperaron audios que aluden a transferencias, imágenes de estupefacientes y diversos diálogos que dan cuenta de la comercialización de estupefacientes.
Además, en la condena se consideró el contenido de la pericia realizada sobre el teléfono celular secuestrado a la hija – Rocío Belén Costa – en la que surgen comunicaciones donde Mauro Costa dice, por ejemplo, “todos lo quieren para visita por eso lo vamos a vender todo”; o “en total tiene que traer 80 g. así me queda para mi también”, “yo prefiero quedarme sin fumar yo y hacerla plata”, entre otras.
A Costa se le decretó la detención en esta causa en mayo del 2023 y a raíz del secuestro de estupefacientes y dispositivos en la Unidad Penal se iniciaron diversas investigaciones en donde fueron condenados parientes y allegados del mencionado como Lucas Matías González, Betiana Matus y Ayelén Costa.