Hace un año que el ingeniero e investigador del Conicet, Rodrigo Castro, junto a un equipo de trabajo, incluidos los profesionales de la salud, vienen proponiendo el ASPI.
En los últimos días el término comenzó a reaparecer por el comienzo de la segunda ola de coronavirus. «Resurgimos para ver si se hace algo distinto a lo que ya se probó y generó incertidumbre», hizo referencia Castro con respecto al ASPO.
El investigador comentó en la Mesa Diaria, programa que se emite por la 96.3 que «el aislamiento tuvo sus beneficios en su momento pero se fue desvirtuando». Sostuvo que «una cuarentena sostenida y prolongada socialmente no funciona» y que por eso surgió una nueva alternativa: el ASPI.
Desde allí, se estudió la evolución de la curva de contagios y se reaccionó a los efectos que se dieron. «Cambiamos la ecuación», explicó Rodrigo.
El ASPI propone realizar aislamientos selectivos dependiendo de la realidad de cada distrito. «Cada político conoce su fuerza y sabe qué decisión puede tomar para demoler la curva», dijo.
Además, informó que no hace falta hacer un cierre masivo de todas las actividades. Por lo tanto, el Aislamiento Selectivo, Planificado e Intermitente, invita a evitar un cierre estricto durante un tiempo prolongado.