Dejó la cabina sin supervisión durante 3 minutos, un tiempo en el que el convoy recorrió más de 7 kilómetros circulando a gran velocidad
Japón tiene una de las redes de ferrocarril de alta velocidad más importantes del mundo. Como sucede en España con la red de AVE, se busca alcanzar la máxima puntualidad posible, aunque en el país del sol naciente se puede llegar a la obsesión con esta circunstancia. Y el mejor ejemplo es lo sucedido este mes en un trayecto en la prefectura de Shizuoka.
Eran las 8.15 de la mañana cuando el conductor de un tren de alta velocidad decidió ausentarse de la cabina del piloto para ir al cuarto de baño. Sin embargo, no lo hizo aprovechando una parada en alguna de las estaciones del trayecto, sino que lo hizo mientras el tren bala estaba circulando a 150 kilómetros por hora.
El conductor dejó al cuidado del tren a un compañero que no tiene título ni está capacitado para manejar el convoy. Por esa razón, el tren estuvo circulando sin ningún tipo de supervisión durante tres minutos, llevando en su interior a más de 160 pasajeros. Afortunadamente, no hubo que lamentar daños, aunque la empresa ha perdido perdón al trascender la noticia.
El peligro de la puntualidad
El conductor del tren bala ha pedido perdón por lo sucedido. Tal y como confirma la CNN, el hombre reconoce que sufrió un dolor abdominal que le hizo acudir al baño. Pero lo grave no es eso, sino que lo hiciera en mitad del trayecto entre las estaciones de Atami y Mishima, entre las que apenas hay 20 kilómetros, dejando la cabina sin supervisión.
La línea Tokaido Shinkansen, donde ocurrió el incidente, conecta Tokio y Shin-Osaka
El hombre, de 36 años de edad, reconoce que no esperó a una parada en alguna de las estaciones para no provocar un retraso en el horario previsto. Por esa razón, la compañía Central Japan Railway se ha disculpado oficialmente y ha informado de lo sucedido al Ministerio de Transporte de Japón. Aseguran que reforzarán la vigente normativa para que una situación tan peligrosa no se repita en el futuro.
Durante los tres minutos que el conductor estuvo ausente de la cabina, el tren recorrió algo más de 7 kilómetros, poniendo en juego la vida de los pasajeros. Eso ha llevado a la compañía a abrirle un expediente y a considerar una sanción. Eso sí, aseguran que es la primera vez que sucede un incidente similar y se desocupa la cabina de un tren en movimiento con pasajeros a bordo.