Pablo Garate tendrá un gran desafío por delante. Primero, estabilizar el sistema económico del Municipio y luego -o mientras- cumplir con sus objetivos como intendente electo de Tres Arroyos.
La situación es compleja, los números no cierran. «Hay un enorme desorden, gastaban de manera poco controlada y está lejos de la austeridad que se necesita en la actividad pública. Vamos a terminar teniendo un déficit de 400 millones de pesos«, dijo Garate de manera tajante sobre el Municipio que le deja el Movimiento Vecinal, liderado por Carlos Sánchez, quien lleva cinco período al frente del Ejecutivo.
Además, deberá resolver el pago de aguinaldos a empleados municipales, los cuales aún no han tenido paritaria para cerrar el año.
«La prioridad es resolver las deudas que nos dejaron estos últimos 20 años. Vamos a tomarnos los primeros 90 días para ordenar todo esta situación«, afirmó.
En cuanto a los objetivos a cumplir en los próximos 4 años como intendente, Garate indicó que «lo principal es que los servicios lleguen a toda la ciudad»:
«Vamos a trabajar en construir el transporte público en Tres Arroyos, en una política de vivienda y mejorar el sistema de salud».
De cara al balotaje, afirmó sin vueltas que milita con el candidato a presidente por Unión por la Patria desde el 2004 y que estos días «estamos abocando en explicarle a los tresarroyenses lo que va a pasar si gana Milei». Y cerró, «la mejor alternativa es la del gobierno de unidad de Sergio Massa«.