El economista se refirió a los principales puntos del proceso de reestructuración de la deuda y evaluó la gestión del Gobierno frente al acuerdo alcanzado con los acreedores.
Hoy en dialogó con el programa radial La Mesa Dominguera, el economista y jefe de la Fundación Libertad y Progreso, Iván Cachanosky, sostuvo que el acuerdo con la deuda es algo positivo, pero enfatizó en que habrá que saber aprovecharla porque “a pesar de haber llegado a un acuerdo, Argentina no recuperó la confianza”.
“Esto no quiere decir que va a poder endeudarse en los mercados internacionales este año, habrá que ver el año que viene cómo evoluciona esa confianza” expresó.
Respecto a la postura que tomó el Gobierno frente a las negociaciones, Cachanosky insistió en que las estrategias que adoptaron no fueron las más acertadas: “Si bien se logró un buen acuerdo, se negoció mal, porque al final la oferta que Argentina terminó realizando fue bastante similar a la que demandaban los acreedores. Si se hubiera hecho una oferta así de entrada, nos hubiéramos ahorrado entre dos y tres meses de incertidumbre”.
“El discurso del Gobierno todo el tiempo fue que no iban a ser flexibles, que los acreedores se iban a tener que ajustar y al final ocurrió todo lo contrario a lo que dijeron. La realidad se terminó imponiendo y terminó ganando el pragmatismo”, agregó.
El economista sostuvo que “no hay un plan económico planteado” ni tampoco “se ven intenciones de reducir el déficit fiscal que son todas cuestiones claves para negociar ahora con el FMI”.
Consultado por las implicancias de este acuerdo en la recuperación de la economía del país, Cachanosky remarcó que “el acuerdo con la deuda es una condición necesaria, pero no suficiente para que Argentina salga de la decadencia”.
“Desde el 2011 al 2019 Argentina no lograba crecer. Todos esos problemas siguen y ahora tenés el agravante de la pandemia, pero incluso si no existiera, todavía tiene que afrontar muchas cosas que son reformas estructurales”, puntualizó.
En definitiva, lo que hizo el acuerdo es patear toda gran parte de esta deuda ocho años adelante, obviamente eso es muy útil si uno hace las reformas y se toma ese tiempo para ir arreglando los desequilibrios económicos que tiene Argentina.
Por otra parte, el licenciado se refirió a la inflación y adelantó que “las perspectivas son altas para el último trimestre del año”.
“Hay que entender que al gobierno actual la situación de la pandemia le cambio la realidad de un momento para el otro, pero antes de la pandemia tampoco creo que había un plan, había ideas sueltas”, precisó.
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