Tedros Adhanom Ghebreyesus criticó la inequidad de la vacunación entre los países ricos y pobres.
El covid-19 ya se ha cobrado más de cuatro millones de vidas en todo el mundo desde el inicio de la pandemia.
Pero la cifra real de víctimas mortales a causa de esa enfermedad podría ser mucho mayor, comunicó el director general de la Organización Mundial de la Salud.
«El mundo se encuentra en un punto peligroso en esta pandemia. Acabamos de superar el trágico hito de cuatro millones de muertes registradas por covid-19», dijo Ghebreyesus durante una conferencia de prensa en Ginebra (Suiza).
También criticó la inequidad existente en las campañas de vacunación entre los países ricos y pobres, e instó a una mayor colaboración internacional para combatir la pandemia «desde un punto de vista moral, epidemiológico y económico».
«El nacionalismo de las vacunas»
«Algunos países con una alta cobertura de vacunación planean aplicar dosis de refuerzo y están levantando las restricciones, o flexibilizándolas, como si la pandemia ya hubiera terminado», dijo el jefe de la OMS.
Sin embargo, debido a las variantes del covid-19 más contagiosas y la «sorprendente desigualdad» en la vacunación, muchas naciones «en todas las regiones del mundo están experimentando fuertes aumentos de casos de coronavirus y hospitalizaciones«, agregó.
Eso ha provocado una «grave escasez de oxígeno y tratamientos», lo que a su vez «está ocasionando una ola de muertes en partes de África, Asia y América Latina«.
«El nacionalismo de las vacunas es moralmente indefendible y una estrategia de salud pública ineficaz contra un virus respiratorio que está mutando rápidamente y se está volviendo cada vez más eficaz para pasar de persona a persona», concluyó Ghebreyesus.