En medio de una profunda crisis, la Dirección General de Cultura y Educación, dependiente de Alberto Sileoni gastó 4 mil millones en libros para ESI.
Luego de la polémica por las repitencias en las escuelas bonaerenses, nuevamente el ministro de Educación vuelve a estar en el centro de la escena. En un video que envió para una jornada educativa, Alberto Sileoni dijo que la ley lo habilita a dar ESI y a transmitir conocimiento científicamente validado en la materia. De esta manera el ministro justificaba la implementación de material “inclusivo” en las escuelas de todo el territorio bonaerense.
“Siempre decimos que preferimos la ley, nos manejamos con la ley (y) eso nos da mucho ánimo”, fueron las palabras con las que Alberto Sileoni, titular de la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, justificó la implementación de contenidos que integran perspectiva de derechos, la equidad de género y el respeto por la diversidad en las escuelas bonaerenses.
La compra fue de 1.218.000 libros, por lo que el gasto superó los 4 mil millones de pesos.
Todo esto se da bajo el ala de la Dirección de Educación Sexual Integral (DESI) dependiente de la Subsecretaría de Educación de la provincia de Buenos Aires, que es la cartera dedicada a integrar la ESI en la estructura del sistema educativo provincial. La Tecla