Se cumple un año de la muerte de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años. Fue asesinado por un grupo de jugadores de rugby que le causaron un paro cardíaco producido por shock neurogénico debido a un traumatismo de cráneo a golpes y patadas. El hecho se produjo a la salida del boliche Le Brique, en Villa Gesell; luego de un supuesto altercado dentro del local bailable.
De acuerdo con el fiscal general de Dolores, y según consta en el pedido de elevación a juicio de 343 páginas, el asesinato de Fernando Báez Sosa estuvo planeado y hubo una división de roles para atacar a traición.
Hay diez acusados por el crimen, que no superan los 21 años de edad. Ocho de ellos (Thomsen, Ciro Pertossi, Lucas Pertossi, Benicelli, Cinalli, Comelli, Viollaz y Luciano Pertossi) cumplen prisión preventiva por homicidio doblemente agravado y están a la espera de un juicio oral, en el cual algunos de ellos podrían ser sentenciados a prisión perpetua. Los otros dos imputados, Milanesi y Guarino, están libertad provisional por supuesta falta de méritos. Ya que no pudieron ser ubicados en la trama del hecho, ni acusados como encubridores.