En invierno no hay nada más lindo que tener los ambientes calefaccionados, pero es importante que estén debidamente ventilados para evitar accidentes por inhalación de monóxido de carbono.
Asegurate de prestar atención a:
Las rejillas de ventilación y los conductos de evacuación de gases de combustión. Que no estén tapados ni obstruidos.
Ventilar los ambientes. Es importante que siempre haya libre circulación de aire desde el exterior.
En aquellos espacios cerrados o con poca ventilación como dormitorios o baños, los artefactos de calefacción a gas deben ser de tiro balanceado.
Las hornallas y el horno no están pensados para calefaccionar. No corras riesgos porque es muy peligroso.