Los vecinos que viven cerca del bar, están hartos de la música fuerte, de encontrarse excremento en las escaleras de sus edificios, de los ruidos molestos y de que suenen sus porteros a la madrugada.
Estos episodios se dan a diario. Por eso, se reunieron para escribir una carta, que elevarán al intendente Héctor Gay para que determine una solución.
El bar está ubicado en Yrigoyen y Lamadrid.
«Hemos recurrido a distintos organismos. La suciedad es indescriptible, lo mismo que la música alta, los ruidos, más aceleradas de los vehículos y las picadas», sostuvo una vecina.
Otro de ellos, concluyó que esta problemática «se da todos los días de la semana» y que «todos los edificios de la zona están pasando por lo mismo».