Se crearon nuevas unidades con distintas frecuencias según complejidad y diferenciables según sus objetivos clínicos o de rehabilitación. Son cuatro módulos principales (clínico 1, clínico 2, rehabilitación y patologías crónicas complejas) combinables con submódulos para optimizar la atención al afiliado.
PAMI también informa que se renovaron los formularios de solicitud y renovación con documentos más intuitivos y unificados en todo el mapa del país.
Pero algunos sectores no ven con optimismo la reconfiguración del servicio: denuncian que la resolución esconde una maniobra para reducir el volumen de las prestaciones y así alcanzar un ahorro significativo de los gastos y el presupuesto.
Los beneficiarios alcanzados en las prestaciones son cerca de 35.000, pacientes con patologías severas o crónicas, características propias de la población afiliada al servicio del PAMI. Con esta nueva modalidad, aseguran sus críticos, quedarán sin cobertura de internación domiciliaria cientos de pacientes con diagnóstico grave.
En la disposición de la reglamentación, advierten que no habrá cobertura para los afiliados que vivan solos. “No podrá autorizarse ninguna prestación de Internación Domiciliaria Integral a aquellas personas que vivan solas, ya que es requisito indispensable la participación activa del grupo familiar y/o el entorno de la persona afiliada que brinde una red de contención a la misma y vele por el cumplimiento del servicio”, dice la norma.
El PAMI también lo pronuncia en un informe de preguntas y respuestas: “Es importante que recuerde que no puede otorgarse IDI si la persona afiliada vive sola y no cuenta con una red familiar o de apoyo. En ese caso, debe dar intervención al área social del Instituto”. El texto de la resolución expresa, a su vez, que “las prestaciones de Internación Domiciliaria Integral no se deberán autorizar a personas afiliadas que se encuentren fuera de un contexto de hogar familiar, ya sea en residencias de larga estadía, geriátricos, instituciones de Salud Mental, de Discapacidad, de Rehabilitación o de Internación Crónica”.
Otro de los puntos polémicos es uno de los criterios de exclusión de la prestación. Precisa que “personas con patologías crónicas estables que no se encuentren en estado de agudización o reagudización de las mismas (por ejemplo, enfermedad de Alzheimer, artrosis, diabetes, hipertensión arterial, hipotiroidismo, etc.)” quedarán fuera de la cobertura.
La nueva disposición aclara, también, que los dos módulos de baja complejidad y de rehabilitación tienen un plazo limitado en su cobertura médica: no extenderán los seis meses de prestación.
Fuente: Infobae