El participante cordobés que representaba al team de La Sole y obtuvo más de 2 millones de votos alzándose como el gran favorito de la audiencia, sufre tartamudez y salió de una fuertísima depresión gracias a Rocío, la mujer que «salvó completamente mi vida».
Anoche, en la gran final de La Voz Argentina el cordobés Francisco Benítez se consagró campeón del talent show de Telefe conducido por Marley. El joven, que representaba al team de La Sole, obtuvo más de 2 millones de votos y se alzó como el gran favorito de la audiencia.
Con el 44,3 % de los votos, el oriundo de Colonia Tirolesa se impuso ante Luz Gaggi en la emocionante definición de la tercera edición del reality. Según la producción, se registraron 4 millones 600 mil votos.
«No pidas perdón. Ganaste porque sos un talentoso y porque te lo merecés», le dijo Pastorutti a Benítez en la emisión de la gran final que marcó 25 puntos de rating y en la que Marley anunció que habrá nuevo certamen el año que viene. «Nos despedimos, pero nos volvemos a encontrar en 2022», aseguró el anfitrión.
Francisco Benítez nació en Colonia Tirolesa, un pueblo de Córdoba ubicado a 27 kilómetros al noreste de la capital provincial. El joven que trabaja en una cooperativa de energía eléctrica comenzó a brillar en La Voz Argentina cuando se cruzó con Josefina Arenas y optó por cantar Oncemil, de Abel Pintos.
Tras esa performance, Lali sentenció: «Sos mi cantante favorito, eso es todo». Y Montaner sumó: «La luz que irradias va más allá de lo que nosotros mismos nos imaginamos, escuchamos y vemos». Pese a emocionar a todos los coaches lo hizo especialmente con la cantante de Arequito.
Desde los seis años Benitez padece de tartamudez, un trastorno del habla que le dificulta expresarse con fluidez y le genera frecuentes imposibilidades en la oralidad. Es por eso que en la bio de su cuenta de Instagram en la que cuenta con 419 seguidores, expresa: «Lo que no puedo decir hablando, lo digo cantando». Allí mismo es donde manifiesta claramente cuáles son sus objetivos: «Progresar y ser feliz».
Desde su primera presentación en el certamen cautivó al jurado con su talento y con su historia de vida. «Sufro tartamudez desde los seis años y lo que me salvó fue cantar», señaló. Benítez canta desde los 10 años. Según contó, expresarse vocalmente es «mi escape para lo que tengo a la hora de hablar». Además, explicó: «Lo hago porque me gusta y porque quiero transmitirle algo a la gente».
Respecto a su historia de vida aclaró que no lo contó para «dar lástima». “Yo simplemente fui a La Voz para hacer lo que me gusta, lo que amo, que es cantar. La única forma que me hace calmar, en ningún momento lo hice con intención de dar lástima, lo hice para poder dejar atrás todo lo que sufrí y poder seguir con la vida”, sentenció Benítez.
Su amor por Rocío, con quien será padre y quien lo salvó de la depresión
«Gracias por devolverme la vida y gracias a vos sigo en pie todavía, con muchas ganas de vivir», suele expresarle en las redes a Rocío, la mujer con quien se convertirá en padre en pocos días. Es que la joven, al decir de Francisco, simplemente le cambió la vida.
«No se dan una idea de la alegría que me trajo su llegada. De sufrir muchos años de depresión por un trastorno de mier.. que tengo que cargar el resto de mi vida, de no salir casi nunca de mi casa, llorar a veces de la bronca por no ser igual a los demás, de ya no aguantar más para acabar con tu vida», se sinceró el año pasado en un emotivo posteo de Instagram dedicado a su novia.
«Sinceramente no lo puedo creer porque no me lo esperaba. A este premio se lo quiero dedicar a cada uno de los participantes que estuvo en el escenario y a mi familia. No me considero un ganador, para mí todos somos ganadores porque pasamos por acá», expresó muy conmovido Benítez.
Además, Francisco abrazó a su compañera que quedó en segundo lugar con el 27,9 por ciento de los votos y expresó: «No quiero que se olviden de Luz porque es una grosa de verdad». Luz, por su parte, manifestó emocionada: «Fran es arte y estoy muy feliz de que haya ganado».