Finaliza el tiempo para que los tenedores de deuda ingresen al canje. Pero hasta el ministro de Economía, Martín Guzmán, reconoció lo difícil de la negociación. La opción más factible es que se postergue el plazo.
Guzmán, ministro de Economía, NA.
Este viernes 8 de mayo el Gobierno fijó como fecha límite para que los acreedores acepten la oferta de reestructuración de la deuda emitida bajo ley extranjera, que asciende a USD 66.500 millones.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, ratificó que no se extendería, al mismo tiempo esta semana habilitó a una modificación de la oferta, en la medida en que los bonistas presenten una alternativa “razonable”.
Se espera que Guzmán anuncie una extensión del plazo, en principio, hasta el 20 de este mes, justo antes de la fecha en la que la Argentina debe pagar USD 503 millones de intereses de los bonos globales para evitar caer en default. El 22 de mayo vencen los 30 días del período de gracia y ya no hay más posibilidades de negociar con los acreedores. O sí. Algunos analistas sostienen que no sería tan grave dejar de pagar el vencimiento del 22, siempre y cuando haya una buena negocación en curso.
Si el nivel de aceptación es muy bajo, como parece que será, el Gobierno tiene dos opciones: cerrarlo con los bonistas que entraron y luego analizar si lanza un nuevo canje con una nueva oferta (aunque en este caso, debería, por la cláusula RUFO, mejorarle las condiciones a los que hayan ingresado ahora); o extender el plazo y seguir negociando con los acreedores.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) se mostró esperanzado en que la Argentina logre una alta adhesión de los acreedores privados a la oferta de reestructuración de deuda, en la jornada previa al vencimiento del plazo que tienen los bonistas para informar si aceptan ingresar al canje de deuda.
A las 17 hora de Nueva York, las 18 en la Argentina, vence la invitación a los acreedores que tienen en su poder alrededor de US$ 67.000 millones para aceptar la propuesta de reestructuración.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, reveló que hay acreedores que ingresaron al canje, y alentó a los que rechazan la propuesta a presentar una contraoferta que tenga en cuenta la necesidad de sustentabilidad en el tiempo.
«Estamos esperanzados de que se logre un acuerdo con alta participación y que genere sustentabilidad de la deuda», expresó hoy el vocero del FMI, Gerry Rice, durante la tradicional conferencia de prensa que suele brindar jueves por medio en la sede del organismo, en Washington.