La epidemia que comenzó en 2018 en el noreste del país ha provocado 3.463 contagios y más de 2.200 muertes.
El segundo mayor brote de ébola jamás registrado concluyó casi dos años y 2.200 muertes después, dijo este jueves la República Democrática del Congo, aunque sigue habiendo resurgencias del virus en algunas partes del país.
Una trabajadora de la OMS preparándose para administrar la vacuna durante la campaña para erradicar un brote de ébola en la ciudad portuaria de Mbandaka, República Democrática del Congo. 21 de mayo, 2018. REUTERS/Kenny Katombe/Archivo
A pesar de las efectivas vacunas y tratamientos que aumentan bastante las tasas de supervivencia si son administrados de forma temprana, el brote se prolongó por los problemas de los equipos de primera respuesta para llegar a los focos de contagio en las inseguras fronteras orientales del país.
Cuando el brote se acercaba a su fin, se declaró otro el 1 de junio en la ciudad occidental de Mbandaka, a más de 1.000 kilómetros de distancia. Los tests genéticos revelaron que las dos epidemias no están conectadas.
“El Ministerio de Salud intentará capitalizar las lecciones aprendidas y los factores de éxito de esta larga epidemia para garantizar la respuesta más efectiva en Mbandaka”, dijo el ministro de Salud, Eteni Longondo, a los medios.
Según indicó, en el transcurso del brote en el este del Congo hubo 3.463 casos confirmados y probables, incluyendo 2.277 fallecimientos.
El mayor brote de ébola ocurrió en África Occidental entre 2013 y 2016, cuando más de 11.300 perdieron la vida por la enfermedad en Guinea, Liberia y Sierra Leona.
*Reporte de Stanis Bujakera y Hereward Holland; editado en español por Carlos Serrano. (Reuters)