El presidente brindó una extensa entrevista en la que repasó sus cuatro años en la Casa Rosada y admitió los tironeos que tiene con la vicepresidenta. “No era mi misión obedecerla”, aseguró
A Alberto Fernández le queda poco más de dos semanas al frente del Gobierno argentino. Su estadía en la Casa Rosada llega a su fin luego de cuatro años marcados por una pandemia, una guerra y una sequía, pero también por indicadores económicos que, en su mayoría, empeoraron respecto de la gestión que recibió de Mauricio Macri, principalmente la inflación, cuyo índice creció notoriamente.
Después de una campaña electoral acaracterizada por el silencio del mandatario, tras el triunfo de Javier Milei en el balotaje del domingo, Fernández retomó sus apariciones públicas, dispuesto, tal vez, a hacer su balance de lo que fue su gestión como presidente. Y, en ese marco, en las últimas horas parece admitir algo que era un secreto a voces: su relación con la vicepresidenta Cristina Kirchner está lejos de ser la ideal.
Además, aseguró que su Gobierno “no tuvo ninguna responsabilidad” respecto de la deuda con el Fondo Monetario Internacional y que todo lo hizo Macri.
Respecto de su relación con la vicepresidenta, Alberto Fernández admitió que termina “distante” tras los cuatro años de gestión y negó que no la haya escuchado, tal como la ex mandataria dijo públicamente hace algunas semanas.
Tras afirmar que el todavía oficialismo debe “abrir un debate interno sobre cómo seguir hacia adelante”, arremetió contra la vicepresidenta.
“No es que en la coalición alguien no ha sido escuchado, eso es mentira. Lo que es verdad es que alguien no fue obedecido, pero hay momentos en que el presidente decide y no debe obediencia a nadie. Por un lado me piden que sea obediente pero por otro lado me dicen que tenga la lapicera. Ahora, cuando la lapicera firma algo que no les gusta…”, sostuvo.
«Me causa gracia porque los medios argentinos me decían que yo era un títere, pero resulta que el títere es el único que termina enfrentado a Cristina. Muy títere no era entonces. Y la queja de que no me escuchan, no es que no escucho, además me lo dicen por escrito. Oir escucho, lo que pasa es que no siempre estoy de acuerdo. Yo la verdad quería a la Argentina subirle la vara a un montón de cosas”.
Fuente 0291 e infobae