La ciudad llevaba 10 meses sin registrar ningún contagio.
Las autoridades del estado de Australia Occidental decretaron un confinamiento de cinco días en las zonas de Perth, Peel y el suroeste del país después de que se registrara el primer caso de transmisión comunitaria de coronavirus en ese estado después de diez meses. Se trata de un hombre que trabaja como guardia de seguridad en un hotel habilitado para personas que deban hacer cuarentena.
“A partir de las 18 de esta noche, toda el área metropolitana de Perth, la región de Peel y la región del Suroeste entrarán en un confinamiento total. Este encierro se extenderá hasta las 18 del viernes”, anunció el primer ministro de Australia Occidental, Mark McGowan, en su página de Facebook.
El regreso a las escuelas, que las autoridades habían previsto para este lunes, se retrasará y los dos millones de habitantes de Perth solo podrán salir de sus casas para hacer ejercicio, recibir atención médica, realizar trabajos esenciales o comprar alimentos.
“Nuestro modelo es tratar el asunto con mucha, mucha rapidez y dureza para poder tenerlo bajo control y que no se produzca la propagación comunitaria del virus, como se ha visto en otros países del mundo”, dijo McGowan.
Las autoridades australianas creen que este primer caso de coronavirus en diez meses se originó cuando un viajero que volvía al país debió hacer cuarentena en un hotel de Perth donde trabaja el guardia de seguridad que dio positivo de covid-19.
El viajero se habría contagiado con la variante británica del virus, que se cree que es más infecciosa que las detectadas anteriormente en Australia.
Hasta la fecha, el estado de Australia Occidental registra 903 casos, entre ellos 15 activos, 878 recuperados y nueve fallecidos.
Mientras tanto, las autoridades nacionales autorizaron a partir de este domingo los vuelos con Nueva Zelanda sin cuarentena. La ruta aérea había sido interrumpida unilateralmente el lunes de la semana pasada ante un posible caso de coronavirus de transmisión comunitaria en el país vecino.
El fin de semana pasado una mujer procedente del extranjero había dado positivo por coronavirus en Nueva Zelanda luego de terminar su tiempo de aislamiento y otras dos personas que estuvieron en las mismas instalaciones obtuvieron el mismo diagnóstico. Esto preocupó al gobierno que encabeza la primera ministra Jacina Ardern por la posibilidad de un nuevo brote de covid-19.
Hasta el momento, Australia registró unos 28.800 casos de contagio y 909 muertes relacionadas con el virus por una población de unos 25 millones de personas.