Flor Vigna y Luciano Castro se conocieron en un gimnasio y comenzaron a hablar, ya que ambos iban a protagonizar una serie en la que finalmente ella se bajó. Sin embargo, la conexión fue más allá y se permitieron conocer más. Luego, surgió el amor.
En el programa de Vero Lozano, Vigna contó cómo fue la primera cita que tuvo con el actor: lo invitó a merendar a su casa. «Me escribió él y merendamos en mi casa», empezó.
La bailarina relató que ese día pidió un budín por delivery y preparó limonada, pero al momento de abrirle al chico que traía el pedido se le cerró la puerta y quedó afuera de su casa, sin las llaves.
«Yo vivo en barrio, señora. No vivo en lugares guachi guau y como se me cerró la puerta la tuve que llamar a mi vieja para que me traiga una llave de repuesto», expresó y añadió que no quiso revelarle el nombre a su mamá de con quién iba a encontrarse y solo se limitó a decirle, «un chico».
Ante la pregunta de Vero por la vestimenta que lució en la primera cita, Flor manifestó que Luciano la conoció «en un estado bien hippie», ya que tuvo menos tiempo de preparación por este pequeño percance. «Fue un desastre hermoso», cerró.