A pocos meses de la condena a prisión perpetua de Marcos Bazán por el femicidio de Anahí Benítez, asesinada y encontrada en la Reserva Natural de Santa Catalina en 2017, la red Innocence Project Argentina tomó la representación legal del caso y esperan revertir la sentencia.
Manuel Garrido, abogado de Innocence Project Argentina, contó: “Es un caso que nos interesa particularmente porque no está corroborado con pruebas racionales, son elucubraciones que hace el Tribunal, es una superstición la condena”.
Con el objetivo de visibilizar la causa, los amigos de Bazán se acercaron a la red que se involucró por las irregularidades que registraron.
Innocence Project
Es una organización que trabaja en condenas cerradas. Una de las equivocaciones en las causas armadas es la utilización de cierta información que tiene “apariencia científica pero se llama ciencia basura”.
“Lo más relevante es que la condena se basa en el supuesto rastro que sigue un perro a la casa de Bazán pero ese supuesto rastro es la interpretación que hace el guía del perro y no se corrobora con otra prueba. El infiere en base a una especulación que no tiene fundamento”, opinó el letrado.
Una vez que un caso judicial solicita ser amparada por la red, debe atravesar una serie de análisis y procesos de investigación, y después se decide si se toma o no la representación jurídica. Sin embargo, en este caso Innocence Project decidió realizar un seguimiento del juicio y a partir de sus observaciones decidieron que realizarán una presentación como amicus curiae en la instancia de apelación en Casación.
En este sentido, Garrido comentó que “la sospecha con Bazán comenzó porque su casa está ubicada en la Reserva y por su estilo de vida”. “Nosotros tenemos expectativas de que se revierta su condena porque es una arbitrariedad. Hay mucha información que la investigación no determinó y una consecuencia lógica en revisar es que se vuelva a encarar la investigación”, afirmó.
Desde Innocence Project resaltaron el rol crucial de Marcelo Villalba, hombre que abusó sexualmente de Anahí y fue declarado inimputable por sufrir esquizofrenia. También destacaron la falta de conexión entre él y Bazán, la mala manipulación de la prueba, la ausencia de doble ciego de los rastrillajes y las dudas sobre el rastro del perro que llevó adelante la tarea.
Con respecto al trato de la justicia, Garrido argumentó que “es increíble que la justicia se haya dejado engañar”. “El tribunal se encuentra frente a un solo imputado y eso genera una presión para que haya una condena porque es un hecho gravísimo y es lógico que haya una demanda de justicia pero la condena a un inocente implica que los culpables están zafando”, manifestó el abogado.