Esta tarde Axel Kicillof, en su visita a Bahía Blanca y durante una conferencia de prensa en el Puerto, dio su veredicto respecto a la situación de Güernica:
«Hubo una denuncia judicial y luego una orden de desalojo que estaba vigente desde hacía tiempo», mencionó el gobernador de Buenos Aires.
En consonancia con este álgido tema: «pedimos una prórroga para hacer un censo. Identificamos a 1904 personas, las cuales estaban 1098 grupos familiares. Propusimos una serie de instrumentos y se les ofreció a las familias diferentes respuestas que tenían que ver con cada situación en particular», argumentó.
Además describió cómo fue el desalojo en la ciudad del Conurbano:
«Se hizo con todos los cuidados posibles, acompañado de los propios fiscales para que la Justicia esté involucrada y se llevó adelante con las pocas familias que quedaban. También había dirigentes de fuerzas políticas, que no tenían un problema habitacional», dijo Kicillof.
«Si no se hacía estábamos en una situación de desacato. Es complejo, pero pusimos el máximo empeño para que las familias abandonaran el predio y tuvieran una solución«, expresó.