El alcalde de Nueva York declaró el estado de emergencia por la escasez de leche en polvo para bebés. El problema afecta a todo Estados Unidos.
«La escasez de fórmula infantil en todo el país ha causado un dolor y una ansiedad inimaginables para las familias de Nueva York y debemos actuar con urgencia«, dijo en un comunicado.
A raíz de la falta de leche en polvo para los chicos, el alcalde autorizó al Departamento de Protección al Consumidor y al Trabajador para tomar medidas para evitar la disparidad en el abastecimiento y una suba de los precios.
El funcionario evaluó que más de 40% de los minoristas se quedó sin leche en polvo y los precios oscilan entre 12 y 22 dólares por lata, dependiendo del comercio.
Por eso, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, invocó el miércoles una ley de producción especial con el objetivo de aumentar el suministro en medio de una ruptura casi total de la cadena distributiva.
Entre la pandemia de coronavirus Covid-19 y el cierre en febrero de una gran planta de los laboratorios Abbott, uno de los principales productores de fórmula infantil, millones de familias quedaron con el acceso muy restringido.
La fábrica cerró por una investigación sobre infecciones que padecieron cuatro bebés tras consumir la leche en polvo de esa firma.
Biden también autorizó al Departamento de Defensa a usar aviones comerciales para transportar por aire cargamentos de leche en polvo infantil desde el exterior. El primero de esos vuelos, con más de 30 toneladas, llegó ayer procedente de Alemania.