Un juez de Georgia rechazó el recurso presentado por la campaña de Trump y del Partido Republicano local para desechar los votos en ausencia recibidos por correo.
Además, desde su equipo denunciaron «votos ilegales» en Nevada, donde Biden estira su ventaja
Jueces de Georgia y Michigan y la Corte Suprema de Pensilvania rechazaron pedidos de la campaña de reelección del presidente Donald Trump para detener el escrutinio en esos estados clave y poder fiscalizar el conteo, un fuerte revés que, sin embargo, no afectó las constantes denuncias del mandatario.
En medio de la serie de decisiones judiciales, la campaña de Trump emitió un comunicado para dejar claro que seguirá adelante con su estrategia de judicialización de los resultados: «Si cuentan los votos legales, ¡fácilmente gano la elección! Si cuentan los votos ilegales y tardíos, ¡nos pueden robar la elección!»
Primero, un juez de Georgia rechazó el recurso presentado por la campaña de Trump y del Partido Republicano local para desechar los votos en ausencia recibidos por correo y fiscalizar que todas las leyes se están cumpliendo en el escrutinio.
En Georgia, apenas faltan escrutar unas decenas de miles de votos y las diferencia a favor del mandatario es apenas mayor de 13.500. De no lograr frenar o cuestionar el escrutinio en las cortes, la pequeña diferencia aún le permitiría a la campaña oficialista pedir un recuento.
Laxalt habló inicialmente de 10.000 «votos ilegales», pero luego aseguró que podrían haber más.
Nevada es uno de los cuatro estados clave que siguen con final abierto a dos días de las elecciones presidenciales y, con el 76% de los votos escrutados, la diferencia a favor de Biden se amplió a un poco menos de 11.500 sufragios.
Fuente: Telam