Más de una vez hemos escuchado que si nos despertamos a las 3 de la mañana es porque un muerto nos está mirando. O peor aún, es la hora de las brujas y los espíritus aparecen para recorrer la ciudad entre los vivos. No importa cuál sea el mito, siempre hubo una conjetura extraña detrás de esta peculiar hora de la madrugada.
Sin embargo, diferentes culturas intentaron quitarle el terror y buscar una buena razón que justifique la repentina apertura de los ojos a esta hora tan particular. Por ejemplo, en la película El exorcismo de Emily Rose explican que debido a que Jesucristo falleció a eso de las 15:00 horas, el diablo, su enemigo, intenta copiarlo despertando a los creyentes a la hora opuesta.
La razón que más sentido cobró fue la propuesta por la medicina china. Esta tradición milenaria explica que el ciclo del sueño es como la vidriera a nuestro cuerpo: según la calidad del mismo y la cantidad de veces que uno se despierta, el tipo de problemas que tiene el organismo. Despertarse a las 3 de la mañana tiene dos significados según los chinos.
Por un lado se refiere a la contención de ira. Se ve que si a lo largo del día hemos acumulado enojo y frustración, esta se libera cuando el reloj marca las 3. En contraposición, también puede aludir a los pulmones y a la tristeza. Para mejorar nuestra capacidad respiratoria hay algunos ejercicios que se pueden realizar y rápidamente mejorará nuestra calidad de sueño.
Desde la ciencia explican que las pantallas de los diferentes equipos electrónicos son los culpables de una mala calidad en el dormir. Debido a la luz azul que irradian, nuestro cerebro comienza a captar esas señales como si fuese el sol diurno, y por eso a veces nos cuesta conciliar el sueño por las noches. A modo de consejo recomendaron dejar usar dispositivos a eso de las 18 horas para eliminar estas señales en el cerebro.